Una de las capacidades que tienen los murales artísticos en espacios públicos es la de resaltar el valor de los espacios que ocupan, incentivando a hacer vida social al convertirlos en lugares percibidos con mayor seguridad.
Por Wäicreaciones (María Eugenia Blázquez Rodríguez y Guillermo Casado Mora). Fotos por JEOSM.
Esta idea es sustentada en las reflexiones que plantea el Foro Europeo para la Seguridad Urbana (EFUS), del Consejo de Europa, la red europea de autoridades locales y regionales dedicada a la seguridad urbana desde 1987.
Una de las claves fundamentales para conseguirlo, es contemplar la participación de los usuarios del espacio en su proceso creativo, para generar reflexiones comunes en torno a la comunidad donde se desarrolla.
En esta línea, el Vicerrectorado de Cultura, Deporte y Extensión universitaria de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), viene planteando, desde 2020, una serie de proyectos de intervenciones artísticas, en las instalaciones Complejo deportivo Sur, con el fin de crear espacios de encuentro, que conecten con los valores propios de la universidad y crean una identidad colectiva del mundo académico.
El estudio creativo Wäicreaciones ha sido el encargado de la coordinación artística del proyecto, proponiendo una participación de todo el alumnado y personal de la UCM, en las diferentes etapas de elaboración de los muros, desde la parte conceptual hasta en la propia intervención pictórica. En todas ellas, las aportaciones de estudiantes han sido relevantes para conformar la imagen final, donde se reflejan los códigos, historias, utensilios, colores e identidades propias de sus estudios. Con ello, se pretendía conseguir un segundo objetivo, el de fomentar la expresión artística como medio de comunicación social.
El artista escogido para dar forma a este proyecto, ha sido Zeta. Bien conocido en el mundo del graffiti y del hip hop desde los años 80, Zeta posee una curiosidad personal e interés por explorar nuevas vías de comunicación por medio de las imágenes, y una manera de pintar fresca y llena de vitalidad, que conecta rápidamente con el público más joven. Además, Zeta es un artista que irradia cercanía y “buen rollo”. Dialogante, y trabajador entusiasta en la búsqueda de una solución perfecta para cualquier reto que se le presente. “Aunque siempre me ha gustado el movimiento del graffiti, en toda mi vida profesional siempre he tenido muchas idas y venidas como cualquier persona. Me interesa conocer muchas otras cosas y tomar muchos otros caminos. Soy muy inquieto, pero muy estable y constante en lo que hago”, nos cuenta Zeta.
Su estilo personal, entre la ilustración y la pintura, con dibujo de contornos marcados, nos acerca a una narración cercana al cómic. Ello contribuye a generar una narración de fácil comprensión, fuerza expresiva y dinámica, idónea para este tipo de trabajos en grandes dimensiones.
El primer muro se realizó durante el invierno del año 2020, bajo el proyecto de Culturación. Este término, que no existe en la RAE, es una unión entre cultura, evolución y participación, teniendo claro que la cultura es un reflejo directo de la sociedad y está en constante cambio, y además ahora se ha perdido el halo de institucionalidad y no hay distinción entre la cultura elitista y la popular, todo es lo mismo. Propone ensalzar los valores de la propia UCM, a través de la escultura «Los portadores de la antorcha», de la escultora Anna Hyatt Huntington.
Este muro, titulado «La antorcha del conocimiento», representa los conceptos trasmitidos por el alumnado que mejor definen para ellos el espíritu de la comunidad complutense: la curiosidad por aprender, la valentía de defender las ideas y el ímpetu de la juventud como portadora del nuevo conocimiento.
El segundo muro, titulado «Forma Urbis», partió de unas jornadas de debate en torno a las intervenciones artísticas en el espacio público, que unos meses atrás tuvieron lugar en el Cartec (Centro de arte Complutense), coordinadas por Wäicreaciones. Una de las más interesantes aportaciones fue la visión integradora y de inclusividad por parte de la logopeda Esther Hernández Durán, que nos orientó sobre el lenguaje de los símbolos e interpretación de los colores por parte de las personas con discapacidad, para poder integrarlo en las intervenciones en la calle y conseguir muros más participativos e inclusivos en los mensajes.
«Forma Urbis», hace referencia al proyecto romano realizado en el siglo III d. C. en el que estaba representada la ciudad de Roma con placas de mármol. Tiene la particularidad de estar orientado de forma inversa, ubicando así el norte en la parte inferior del plano y el sur en la superior, dotándolo de más protagonismo. Esta elección no ha sido casual, ya que el graffiti y muralismo en Madrid se empezó a desarrollar en la zona sur, principalmente, en los municipios de la periferia como Alcorcón.
El muro muestra los elementos característicos de las áreas de conocimiento de los estudios que se imparten en la Universidad Complutense, y objetos inspirados en piezas de los museos universitarios, de gran valor académico y de patrimonio cultural. La interrelación en el diseño de todos ellos, de manera narrativa en una única escena, intensificado con la representación de cada facultad por su color distintivo, hacen de ello una lectura holística de lo que es el conocimiento, de lo que es y representa el mapa «Forma Urbis» de la Universidad Complutense.
Un tercer muro, que se realizará en la primavera de este año, completa este proyecto de integración social del espacio público del Vicerrectorado de Cultura, Deporte y Extensión universitaria, basado en el deporte e inspirado en la diosa latina Atenea Niké, que le da nombre al muro. Diosa de la sabiduría y la acción, de la fuerza, velocidad, resistencia y agilidad sobrehumana.
Como conclusión, se plantea la intervención artística participativa como una herramienta de transformación social y cultural que beneficia de varias maneras al ciudadano, pues propicia el diálogo entre los participantes, favorece el desarrollo del pensamiento crítico, la identidad colectiva, la convivencia cívica y cambia la percepción de ese espacio, sintiéndolo más seguro y ordenado al revitalizarlo.